American Chemical pinta con tradiciones los barrios cruceños

La primer plaza tradicional de Santa Cruz  es obra de la empresa de Pinturas American Chemical con su proyecto Pintaman.

La plazuela del Barrio Ende ubicado en el 3er anillo esquina Av. Virgen de Cotoca de la ciudad de Santa Cruz se llenó de niños y vecinos al sentirse atraídos por un personaje costumbrista que se columpiaba y escondía detrás de los árboles asustando al que pasaba, era el duende, con su vestuario blanco y su enorme sombrero de sao’.

En otra parte de la plazuela, saludando a las mujeres con un beso en la mano, llegaba el Camba Calucha que contando sus característicos chistes desprendía carcajadas de quienes lo observaban. Dos mujeres fueron el centro de atención, una por su altura y peculiar sonrisa, era la Reina de Santa Cruz, Fernanda Castedo y la otra por su vestimenta típica camba, el tipoy y la flor entre la oreja, era Andrea Alba, Reina de la tradición cruceña, con ellos se inició el acto, hubo mucho humor con las declamaciones de los niños de la zona, se bailó al ritmo del taquirari, hubo degustación de chicha, somó y horneados típicos, todo esto hizo que fuera una mañana típica y tradicional rescatando nuestras tradiciones y costumbres aún más jugando con el trompo y saltando la rayuela dibujados en los pisos de la plazuela.

El duende dejó de asustar al descubrirse que era Pintaman, el héroe urbano de Pinturas American Chemical que no solo quiere recuperar los espacios públicos de los barrios, sino también que  recuperemos nuestras costumbres y  tradiciones, trayendo a nuestra memoria todo aquello que nos identifica. Ésta vez, Pintaman se refirió a su labor de seguir recuperando espacios públicos a través del color, tal como fue con la plazuela del Barrio Ende, la misma que fue revestidad de identidad y tradiciones cruceñas, bajo una temática oriental, que recordará a los vecinos la riqueza de nuestra tierra y la Cultura Cruceña. Dicha plazuela fue bautizada como «La primer plazuela tradicional» de Santa Cruz; convirtiéndose en un escenario lleno de magia e imaginación para las más de 300 familias y niños de la zona.

Gracias a pinturas American Chemical, Pintaman seguirá buscando espacios urbanos para pintar sonrisas en los barrios, porque la pintura no solo cambia el color, sino que cambia la vida de las personas, pintando de esperanza sus corazones.

Fuente: American Chemical